Soy Cesar : Métete Abajo de la Barra

Las piernas tiemblan. Las manos duelen. Sientes sudor frío bajando por tu espalda. Te ves al espejo un par de segundos y luego volteas al piso por tercera o cuarta vez. Ahí esta, esperandote. Esa larga barra de 45 libras con discos a los lados que le suman 60 o 70 extras. Solo queda respirar profundo, levantarla, y meterte debajo de ella lo más rápido y controlado posible.

Si intentas hacerlo demasiado rápido fácilmente puedes perder el balance. Pero si lo haces demasiado lento nunca lograrás separarla del suelo. Se trata de un delicado equilibrio entre control y explosividad. Una delgada línea entre fuerza y estupidez pura. Como con todo en la vida, aveces, no debes que pensarlo demasiado y confiar en que puedes lograrlo. Aventarte e intentarlo aunque nunca lo hayas hecho antes. Al final, si te quedas pensándolo, tampoco va a suceder.